La quemadura solar es un daño en la piel debido a una sobreexposición a los rayos ultravioleta del sol. En situaciones normales, las quemaduras solares producen un dolor leve y afecta a la parte externa de la piel. Con un poco de tiempo y cuidado se te aliviará pronto. Lo único que te va a pasar es que la piel se va a inflamar un poco y se te va a poner roja. Entonces para que no te pase eso, lo mejor es que desde el principio uses cremas para el sol a ser posible con protección factor 50, sin olvidarte de la cara. La protección debe aplicarse a diario. Cualquier profesional especializado en la salud de la piel, ya sean dermatólogos o personas que trabajan con asesoramientos del cuidado de la piel recomiendan usar protección solar específica para la cara, de factor 50 y todos los días del año.
La piel es la gran olvidada del cuidado de la salud. Cuando se expone al calor extremo, se desnaturalizan las proteínas que tiene. Para que te hagas una idea, es como si se cocinaran. Las células mueren y el cuerpo responde en forma de inflamación y, posteriormente, enrojecimiento de la piel. Es molesto, aunque las quemaduras por el sol en la mayoría de los casos no son graves. De todas formas, vamos a ver a continuación, qué tipos de quemaduras hay y qué puedes hacer al respecto para que tengas una idea más clara.
Tipos de quemaduras
Normalmente, hay tres niveles de quemaduras:
- Primer grado: Es la más leve porque afecta a la capa externa de la piel y causa el típico enrojecimiento, hinchazón y algo de dolor.
- Segundo grado: Sabrás si estás en este nivel porque afecta a la capa externa y un poco más interna. Además de dolerte, tener la piel roja e hinchada, te saldrán ampollas. También se les llama "Quemaduras de espesor parcial".
- Tercer grado: Estas son de "Espesor total" porque afecta a las capas más internas de la piel, la cual en unos casos puede adoptar un color blanquecino y en otros, un tono más oscuro. Además puede estar adormecida.
Lo normal es que las quemaduras solares sean de primer y segundo grado. En el caso de que no hayas usado protección solar frecuentemente y te hayas quemado, tienes que hidratarte muy bien la piel con cremas como "After Sun", sin olvidar la constante ingesta de líquidos.
En caso de que el dolor persista o empiecen a aparecer otros síntomas como escalofríos, fiebre, etc, consulta a un médico para salir de dudas. Puede que estés necesitando algún analgésico y no lo sepas. En cualquier caso, la piel se regenera con unas pautas que el médico te indicará que debes seguir y si es una quemadura superficial, no te dejará cicatriz. Sin embargo, eso no quita que haya sufrido y que se manifiesten consecuencias en el futuro como el envejecimiento prematuro de la piel, manchas, etc. Las de tercer grado sí suelen dejar cicatrices.
Tratamiento para las quemaduras
- Refrescar la piel. Puedes poner una toalla húmeda o darte un baño con agua fresquita y bicarbonato de sodio. Para notar más alivio refréscala varias veces al día.
- Tomar mucha agua. Es muy importante beber mucha agua durante las 48 horas posteriores a las quemaduras solares ya que la hidratación ayudará a regenerar la piel.
- Aplicar crema hidratante. Es importante hidratarla también mucho con crema, incluso, si se empieza a descamar.
- Medicamentos. Si dada tu situación el médico te lo aconseja, puedes aliviar la picazón con algún antihistamínico o alguna crema que contenga corticoides.
- Protegerte del sol. Evita por todos los medios que vuelva a darte el sol en la zona afectada. Por simple que parezca, muchas veces lo haces sin darte cuenta.
¿Cuáles son las partes del cuerpo más vulnerables a las quemaduras solares?
Hay partes del cuerpo que necesitan una protección más especial que otras. El escote, el cuello, la calva, la cara, las orejas, hombros, empeines y manos son las zonas que más se recomiendan proteger porque son un poco más débiles para las quemaduras solares. Y no solo hay que hacerlo usando cremas de protección solar, sino también con ropa, sombreros, evitando exponerse a los rayos ultravioletas en horas fuertes de calor (12 a 16 horas). Y aquí se refiere no solo a las playas y a las piscinas, sino también para que no practiques actividad física en esas horas y sin protección solar.
Qué debes tener en cuenta
La crema solar debería usarse en función de la edad de la persona, del tipo de piel y las circunstancias de la exposición solar. Una de las cosas que hay tener en cuenta y que a muchas personas se les olvida porque parece una obviedad es aplicarse la crema correctamente. Por si acaso, primero léete las instrucciones que vienen en la etiqueta del envase. Después échate crema de manera generosa por todo el cuerpo como mínimo media hora antes de la exposición y extiéndetela muy bien para cubrir todas las partes del cuerpo y que estén secas. Esto último debes tenerlo más en cuenta si usas protección en spray o bruma. Otra cosa, no uses las cremas de un año para otro porque va perdiendo efectividad.
Debes tener en cuenta también las instrucciones de las cremas infantiles, si le vas a poner la crema a tus hijos o nietos, además de usar un factor de alta protección, necesitan cubrirles con gorros o gorras, gafas de sol, ropa protectora del sol e hidratarlos más a menudo.
Los rayos solares penetran en la piel de manera invisible, parece que no pasa nada, pero realmente dañan la piel. Esto también es válido para los días nublados. Muchas veces te confías porque no está el sol fuera y cuando terminas el día estás rojo de arriba a abajo y dolorido. De igual manera, si vas a hacer deporte, senderismo, pasar el día en el campo, etc. La exposición solar en exceso y las horas malas de estar bajo el sol son universales, independientemente del lugar donde te encuentres.